ENTIERRAN AL VIAJERO DEL TIEMPO EN OJINAGA
El pasado fin de semana se llevó a cabo la celebración en esta frontera titulada “El IV Reencuentro Ojinaguense”, celebración que se ha estado llevando a cabo, año con año o en ocasiones cada dos años, dependiendo del ánimo de los organizadores; en esta ocasión, lo que más llamó la atención fue que el último día de esta festividad se rifaría un vehículo último modelo, el cual se enterraría en el zócalo municipal para, después de 50 años, sacarlo del hoyo y ser reclamado por familiares directos del ganador de dicha rifa.
Según se dio a conocer, la rifa del auto fue únicamente entre un pequeño grupo de personas que se cooperaron para comprar el auto y dentro de 50 años, al momento de sacar el auto del socavón, familiares del ganador de la rifa obtendrían dicho automotor y serían ellos quienes abrirán el vehículo, el cual fue utilizado como cápsula del tiempo, pues en el interior se le pusieron varios objetos, memorias, fotografías, teléfonos y diferentes objetos de la época, para que al momento de ser expuestos, las personas que vivan en esos tiempos, puedan recordar y hacer historia de ese momento tan especial que vivirán.
Cabe mencionar que el entierro de este vehículo, llamado “El Viajero del Tiempo”, se realizó dentro de un clima de inconformidad, pues existió un gran número de personas que se oponían a que un vehículo de este valor se enterrara, habiendo tanta necesidad en la ciudad, de hecho un padre de familia comentó que por qué en lugar de enterrarlo no lo rifaban o vendían e incluso se lo donaran, pues él tiene que viajar de manera continua a la ciudad de Chihuahua a trasladar a su hijo de sólo 3 años, el cual tiene una enfermedad incurable y ya tiene 2 años viajando continuamente.
De cualquier manera se llevó a cabo el entierro de este vehículo y como funeral, acarreó muchas personas que acudieron a dicha sepultura y posteriormente se retiraron a sus hogares. Sin embargo, en los últimos 15 días fue tema de conversación en los cafés, oficinas y domicilios el caso de este vehículo y seguramente habrá más comentarios al respecto, toda vez que no fue una institución gubernamental la que realizó el hecho, sino una asociación civil y esto generó la inconformidad de la ciudadanía, de tal manera que este “IV Reencuentro Ojinaguense” se vio muy por debajo de las expectativas generadas, pues la afluencia de personas a estos eventos había sido más copiosas en las anteriores ocasiones.
El Heraldo de Chihuahua