Negará Trump solicitudes a quienes ingresan por frontera con México
El presidente Donald Trump informó que terminará las protecciones de asilo para la mayoría de los migrantes que llegan a la frontera de Estados Unidos y México, esto, como parte de una escalada importante en la batalla del mandatario para reprimir la inmigración.
De acuerdo con una nueva regla publicada en el Registro Federal, el órgano oficial del gobierno de EU, los solicitantes de asilo que pasen por otro país primero no serán elegibles para asilo en la frontera sur de los Estados Unidos. La regla –que se espera que entre en vigor hoy martes– también se aplica a los niños que han cruzado la frontera solos.
En El Paso, abogados locales tachan de anticonstitucional la medida del presidente, tal como muchas otras implementadas durante su administración, sin embargo, se considera como amenaza directa a la comunidad.
Tal es el caso de Iliana Holguín, abogada de inmigración de El Paso. “Es contra la ley de los Estados Unidos, y la ley es muy especifica al establecer que, cualquier persona que se presenta en la frontera puede pedir asilo político”, dijo.
“Trump ha tratado de limitar de todas las formas imaginables esa opción para personas que vienen huyendo de sus países por violencia”, agregó.
Holguín compartió que se siente segura de que esta nueva política se topará con los mismos obstáculos de las propuestas hechas en el pasado por el mandatario, iniciando con demandas, bloqueos por parte de jueces federales, congresistas y organizaciones en defensa de la comunidad migrante.
Según lo publicado por Trump, la regla se aplica a cualquier persona que llegue a la frontera. A veces, los solicitantes de asilo de África, Cuba o Haití y otros continentes logran llegar, pero la gran mayoría de los migrantes que llegan recientemente vienen de América Central.
Hay algunas excepciones, incluso para las víctimas de trata de personas y solicitantes de asilo a quienes se les negó la protección en un país.
Si el país por el que pasó el migrante no firmó uno de los principales tratados internacionales que rigen la gestión de los refugiados (aunque la mayoría de los países occidentales los firmaron), un migrante todavía podría solicitar el asilo en los Estados Unidos.
Aumentarían deportaciones
De acuerdo con Holguín, en caso de que la propuesta de Trump se convierta en realidad, localmente el impacto traería un incremento en las deportaciones desde El Paso.
“Es posible que veamos más gente de esta área de esta frontera que sean deportados”, declaró.
Dijo que es importante que la gente se mantenga informada, ya que con esta Administración las cosas cambian diariamente.
México en contra
El Gobierno de México informó que la medida tomada de forma unilateral, en el ámbito de la jurisdicción de Estados Unidos, no afectará a ciudadanos mexicanos.
“México mantendrá su política de asilo y refugio como marcan la Ley sobre Refugiados, Protección Complementaria y Asilo Político, nuestra Constitución, los instrumentos internacionales de los que México es parte, así como la tradición histórica de nuestro país”, declaró el gobierno de México.
Se informó que el país no coincide con medidas que limiten el acceso al asilo y refugio a aquellas personas que temen por su vida o seguridad en su país de origen por motivos de persecución.
El Gobierno de México se mantendrá atento a las implicaciones que esta decisión de Estados Unidos podría conllevar para los solicitantes de asilo de otros países que ingresen a ese país por su frontera sur. En este sentido, se prestará especial atención a que se respete el principio de ‘no devolución’ reconocido por el Derecho Internacional vigente.
Ya no habría ‘miedo creíble’
El movimiento del gobierno de Trump, incluso si está bloqueado por las cortes, está revirtiendo décadas de la política estadounidense sobre cómo se trata a los refugiados y marca una escalada incluso en comparación con otros esfuerzos de línea dura destinados a ahuyentar el flujo de personas de naciones pobres y desgarradas por la guerra.
La ley permite que los refugiados soliciten asilo cuando llegan al país, -independientemente de cómo lo hayan hecho-, pero existe una excepción para aquellos que han llegado a través de un país considerado «seguro».
Sin embargo, la Ley de Inmigración y Nacionalidad, que regula el asilo, es vaga sobre cómo un país es determinado como ‘seguro’; dice «de conformidad con un acuerdo bilateral o multilateral».
La nueva regla también se aplicará a la selección inicial de asilo, conocida como entrevista de «miedo creíble», en la que los migrantes deben demostrar que tienen un temor creíble de regresar a su país de origen. Se aplica a los migrantes que llegan a los Estados Unidos, no a los que ya están en el país.