Temían que tal designación pondría en riesgo la colaboración de México en el combate contra tráfico de drogas y la migración ilegal.
WASHINGTON.- Semanas antes de la declaración que el presidente Donald Trump hizo en este mes de que designaría a los cárteles mexicanos de la droga como organizaciones terroristas extranjeras, miembros del gabinete y asesores de alto rango del gobierno le recomendaron que no lo hiciera, según le comentaron a Reuters cinco personas que tuvieron conocimiento de ese asunto.
Las recomendaciones, que algunas de las fuentes describieron como unánimes, no fueron reportadas anteriormente. Y fueron motivadas en parte por la preocupación de que tal designación podría dañar los vínculos entre Estados Unidos y México, poniendo en peligro la colaboración de México con los esfuerzos que está haciendo Trump para detener la inmigración ilegal y el tráfico de droga por la frontera.
Otra preocupación clave fue que la designación podría facilitarles a los migrantes que obtuvieran asilo en Estados Unidos al asegurar que estaban huyendo del terrorismo.
Stephen Miller, uno de los asesores más influyentes en la Casa Blanca y responsable del diseño de las políticas de Trump para frenar la inmigración fue uno de los que se opusieron.
Menos de dos semanas después, el 9 de diciembre, el presidente comentó en un tweet que iba a retrasar temporalmente el plan debido a la petición que le hizo el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador.
El funcionario de alto rango de la administración dijo que el anuncio del presidente no es una retractación sino una medida estratégica.