Un inmisercorde rallie de 17 carreras en la parte baja de la cuarta entrada, en la que 22 bateadores se pararon en la caja de bateo, dio a los Indios de Ciudad Juárez una victoria por supernocaut de 18-0 sobre los Soles de Ojinaga, en el arranque del Campeonato Estatal de Beisbol de Primera Fuerza “Jesús ‘El Bambino’ Avilés”, en el Estadio Juárez Vive.
Los Indios timbraron la rayita de la quiniela en la parte baja de la segunda entrada, la única sucia en el juego.
Con un out, Juan Pedro Plascencia conectó doble al abridor José Domínguez.
Oscar Aragonés fue dominado con rola al cuadro y, en error del short stop Eduardo Guillén, a batazo de Jaime Gurrola, Plascencia Chávez anotó.
En la parte alta del tercer rollo, Servando López, el inicialista por Juárez, permitió el primer hit, luego de dos innings perfectos en los que recetó tres ponches y concedió tres bases por bolas.
Los Soles amenazaron en ese episodio con empatar la pizarra, colocaron hombre en la intermedia, pero el pitcher guanajuatense sacó el tercer out con un rodado al cuadro.
En el cuarto capítulo y con un mate en la pizarra, los visitantes tuvieron corredores en primera y segunda base, pero López dominó a Guillén con una rola para doble play y salió del apuro.
Los indígenas volvieron al ataque en la parte baja del cuarto inning que resultó más que de pesadilla para Domínguez y compañía y marcó el rumbo del juego.
Plascencia recibió pasaporte, Aragonés dio sencillo al prado izquierdo y Gurrola caminó a la inicial con boleto gratis.
Con la casa llena, Ricardo Flores empujó dos rayitas con imparable y movió el score tres a cero.
La fiesta continuó y el camarero Rafael González depositó la esférica del otro lado de la barda por el jardín izquierdo, remolcó a Gurrola y a Flores y la tribu aumentó su ventaja, seis carreras a cero.
El rallie no paró ahí, Oscar Sigala se embasó con un elevado mal fildeado por el patrullero central y el segunda base de los Soles.
José Torres no se quedó atrás y con un bambinazo al derecho mandó a la goma a Sigala y timbró la octava anotación indígena que marcó la salida del juego de Domínguez a quien el manager Marco Antonio Figueroa le aplicó la grúa.
Entonces, el supernocaut estaba por llegar.
Figueroa trajo del bullpen a Andy Cotto, quien golpeó a Ricardo Torres y le dio boleto a Plascencia.
Aragonés dio hit, Torres anotó la novena carrera aborigen y Cotto también dejó el partido.
En un fatídico cierre de la cuarta entrada para los Soles, el relevista Enrique de Jesús Verde tampoco las trajo todas consigo y otorgó un par de pasaportes consecutivos.
Ya con dos outs, Verde dio base a Gurrola, la casa se llenó de teporacas, Flores recibió cuatro bolas malas y ‘de caballito’, Plascencia timbró la décima carrera aborigen.
Verde dejó el montículo y fue relevado por el zurdo Israel Montes, quien igualmente cumplió una labor para el olvido.
En un golpe de Montes a González, los Indios timbraron la rayita número 11.
Omar Gómez empujó entonces a Gurrola con sencillo y la tribu se alejó de los Soles, 12 a cero en la pizarra.
Aún con el cuarto lleno, Sigala recibió otro pasaporte y de nuevo, ‘de caballito’, los Indios pisaron la registradora con Flores para el 13-0.
Montes le dio otro pasaporte con el cuarto repleto a José Torres y González puso el 14-0.
Ricardo Torres vació la casa con un doble, le dio la despedida a Montes y los aborígenes incrementaron su delantera 17 a 0.
Ante los lanzamientos de Luis Bernal, Plascencia conectó doble al derecho y remolcó a R. Torres con la rayita número 18, la última en el calvario de los ojinaguenses.
El pitcher ganador fue López, quien tiró cuatro entradas y media en las que permitió sólo un par de inatrapables, ponchó a tres bateadores, dio cuatro bases por bolas y su cuadro le cometió un error.
Domínguez cargó con el revés.
A la ofensiva, por los Indios, el menor González y J. Torres conectaron cuadrangulares.
González impulsó cuatro anotaciones y, Torres, tres.
Plascencia dio dos hits en igual número de turnos y anotó tres veces, en tanto, Aragonés, quien bateó tres veces en el cuarto capítulo conectó tres imparables en el cuarto inning.
