Se encuentran en proceso de elaboración de un nuevo protocolo sanitario estatal que contendrá medidas equivalentes a las exigidas por Estados Unidos.
Chihuahua.- Debido al cierre de la frontera estadounidense para la exportación de ganado, se tuvieron que vender 35 mil cabezas al mercado interno con un valor hasta 14 mil pesos menor por animal, lo que representa una pérdida de 490 millones de pesos para los productores del estado, indicó el jefe del Departamento de Ganadería, Juan Carlos Flores Márquez.
Informó que se encuentran en proceso de elaboración de un nuevo protocolo sanitario estatal que contendrá medidas equivalentes a las exigidas por Estados Unidos, con el fin de fortalecer el estatus sanitario del estado y contribuir a una reapertura más rápida de la frontera.
“Estamos trabajando en un protocolo porque se tiene que oficializar todas las acciones que se van a implementar para permitir que entre ganado en dado caso con las condiciones y el protocolo que nosotros estemos marcando”, explicó.
Detalló que este protocolo incluirá inspección uno por uno de los animales en cuarentenarias en las entradas del estado, aplicación de baños con ivermectina, así como lavado y desinfección de camiones. En tanto no se oficialice el nuevo esquema, no se está permitiendo la entrada de ganado foráneo que pretenda permanecer en Chihuahua, solo el tránsito con control sanitario.
Flores Márquez precisó que las autoridades federales informaron sobre el arribo de un barco con 4,600 cabezas de ganado procedente de Nicaragua a Durango, con protocolo sanitario aprobado por Senasica. “Aseguran que ese ganado viene con todas sus pruebas: brucelosis, tuberculosis, gusano barrenador y además con tratamiento de ivermectina antes de subir al barco”, dijo.
Indicó que se espera la llegada de otro lote, superior a cinco mil cabezas, también con destino a Tlahualilo. Detalló que este ganado fue adquirido por la empresa SuKarne y permanecerá en una engorda ubicada en Durango, desde donde será enviado directamente a sacrificio. “No nos tocaría participar en dejar entrar ese ganado a nosotros porque no viene para acá, se quedaría en Durango”, aclaró.
Sin embargo, reconoció que la cercanía de esa engorda con el estado genera inquietud entre los productores locales. “No estamos en acuerdo total con lo que se está haciendo, porque al final del día no deja de ser un riesgo”, apuntó.