La carta, firmada por 20 de los 27 gobernadores republicanos, fue dirigida al presidente y la vicepresidenta Harris.
Veinte de los 27 gobernadores republicanos de Estados Unidos enviaron una carta a la administración Biden, en la que le exigieron atender la situación en la frontera, informó el New York Post.
Entre el grupo que envió la carta el martes se encuentran los gobernadores Doug Ducey, de Arizona; Greg Abbott, de Texas; Kristi Noem, de Dakota del Sur, y Brian Kemp, de Georgia.
En la misiva, los mandatarios aseguraron que la frontera de Estados Unidos con México jamás estuvo cerrada ni es segura.
También acusaron al Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) de burlar su autoridad al pedir a organizaciones privadas y no lucrativas dar refugio a los menores detenidos en la frontera.
“Permitir al gobierno federal ubicar a un número potencialmente ilimitado de niños migrantes no acompañados en las instalaciones de nuestros estados por un periodo no especificado con nula transparencia es inaceptable e insostenible”, dice el texto.
“No tenemos ni los recursos ni la obligación de resolver el problema del gobierno federal y correr con los gastos de las consecuencias de las acciones erróneas de esta administración”, continúa el mensaje.
La agencia Associated Press informó este martes que la administración Biden actualmente alberga a unos 21 mil menores migrantes en 200 ubicaciones a lo largo de más de 20 estados, destaca el New York Post.
Según el medio, los gobernadores se refirieron a la actual situación en la frontera como “una crisis autoprovocada que explota a las familias, socava la seguridad pública y amenaza a nuestra seguridad nacional”.
Por lo anterior, los líderes culparon a las “irresponsables” revocaciones de políticas migratorias federales de la era Trump, incluyendo el haber detenido la construcción de un nuevo muro fronterizo y modificar los convenios de asilo con algunos países centroamericanos.
“Mientras las víctimas más directas de los cambios en las políticas serán los niños explotados y traficados por pandillas y cárteles, el desastroso impacto de sus políticas en la recuperación de Estados Unidos tendrá un largo alcance. Las autoridades federales, estatales y locales están abrumadas, y la situación en el campo es devastadora”, concluyeron los gobernadores.
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, aseguró este martes desde la Casa Blanca que la frontera “está cerrada” pero se rehusó a expulsar a menores no acompañados.
“Estamos expulsando a adultos solteros y familias bajo la autoridad ‘Título 42’ de los Centros para el Control (y Prevención) de Enfermedades, y hemos decidido como administración… que no expulsaremos a niños no acompañados”, reiteró.
