MURO INNECESARIO: EXJEFES DE PATRULLA FRONTERIZA

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Exjefes de agencias federales aseguran que el nuevo muro fronterizo en poco ayudaría a sus agentes a asegurar las mil 300 millas de frontera que no están cercadas, aun cuando México pague el multimillonario costo, como insiste el presidente Donald Trump.

Benjamin Webb, quien hasta la semana pasada fue director ejecutivo de la Oficina de Políticas y Planeación de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), afirmó que los recursos estarían mejor invertidos en nueva tecnología e incentivos para reclutar a nuevos agentes.

“Toda esa idea de construir un gran muro es absurda. Ya colocamos un cerco en donde más lo necesitábamos”, dijo. “Sería un increíble desperdicio del dinero de los contribuyentes”.

Actualmente, existen cercos en 700 millas a lo largo de la frontera para ayudar a los agentes a patrullar esa zona, además de contar con cámaras, sensores y otra tecnología.

Oficiales fronterizos señalaron que en muchas áreas, un muro sería inútil porque allí no sucede nada.

“Es importante saber por dónde cruza la gente a Estados Unidos, pero es igualmente importante saber por dónde no está cruzando”, comentó Michael Fisher, quien se retiró como jefe de la Patrulla Fronteriza a finales del 2015.

A lo largo de 850 millas (mil 367 km) de frontera hay poca o nula actividad humana, aseguró Fisher.

La Patrulla Fronteriza ha desarrollado maneras de monitorear esos lugares de bajo riesgo, usualmente en áreas desoladas, utilizando la tecnología y el análisis.

En el 2013, Fisher lanzó una iniciativa apodada Skyfall, para estudiar el flujo de migrantes y otras personas que cruzan, utilizando imágenes de satélite, mapas y sensores para identificar en dónde son necesarios los recursos.

Agentes aseguran que el muro es efectivo en las ciudades que colindan con México y en zonas de alto tráfico de inmigrantes y narcotraficantes.

La inmigración ha caído

El Instituto de Estudios y Análisis de Seguridad Interna, que es un grupo de expertos financiado por el Gobierno federal, encontró en el 2011 que las aprehensiones de la Patrulla Fronteriza se habían desplomado en por lo menos un 75 por ciento en las áreas que estaban cercadas.

Debido al cambio en el flujo de migrantes y tácticas de contrabando, los agentes Fisher y Mark Morgan –hasta esta semana jefe de la Patrulla Fronteriza– están de acuerdo en que ciertas secciones de la frontera requieren probablemente que se coloque más cerco.

Sin embargo, un reporte del Servicio de Investigación del Congreso emitido el pasado abril, encontró que “cada milla adicional podría estar en lugares más remotos y por lo tanto, sería más caro instalar y mantener y es muy probable que frene a menos migrantes no autorizados”.

La inteligencia geoespacial, dijo Fisher, claramente ha mostrado durante años, que los traficantes y contrabandistas de personas mayormente han evitado ciertas partes de la frontera, incluyendo áreas como Bootheel en Nuevo México y el Big Bend en el Oeste de Texas, en donde no existen caminos ni infraestructura en ningún lado de la frontera.

En otros lugares el serpenteante río y su planicie aluvial hacen que el muro sea impráctico.

Demasiado costosa

Ya sea que esos hechos tengan o no eco en la Casa Blanca de Trump, los planes y estimaciones para construir una barrera fronteriza ya están circulando en Washington.

Una estimación interna del CBP reveló que construir un muro de 700 millas (mil 126 km) de largo costaría de 15 a 20 mil millones de dólares.

Una estrategia más modesta consistiría en mejorar las casi 200 millas (321 km) de barreras existentes y podría llevarse a cabo rápidamente para que Trump pudiera lograr una victoria, eso costaría aproximadamente 2 mil millones de dólares.

El senador Ron Johnson, republicano por Wisconsin y presidente del Comité de Seguridad y Asuntos Gubernamentales de Seguridad Interna del Senado, planea llevar a cabo una audiencia el 1 de febrero para examinar cuánto cerco existe actualmente, qué sería viable construir y cuánto costaría, según dijo un asesor.

La construcción de la mayoría de las actuales 650 millas (mil 46 km) de cerco “primario” –que son barreras de primera línea que varían en altura, diseño y longitud que están justo dentro de Estados Unidos– empezaron durante el segundo término del presidente George W. Bush.

El tipo de cerco que se colocó dependió del terreno y la ubicación, incluyendo cercos peatonales de igual altitud, que pretenden detener a las personas no autorizadas que cruzan por allí, así como las barreras para vehículos.

En algunos lugares, el proyecto se prolongó durante años, siendo retrasado por los desafíos legales y preocupaciones ambientales.

El Departamento de Justicia de Estados Unidos entabló cientos de demandas para ganar acceso y eventualmente adquirir terrenos en donde estaba planeada la valla.

En Roma, Texas, en donde el cerco propuesto ha reducido el acceso de los trabajadores a las bombas de agua de la ciudad, los registros de la Corte muestran que el problema no se ha resuelto, y casi no ha tenido actividad reciente.

El terreno en sí es una barrera

“De manera general, no tenía sentido construir un cerco en ciertas áreas y tampoco podría ser factible construirlo en otras áreas debido al terreno y otros factores”, dijo Rowdy Adams, ex oficial de la Patrulla Fronteriza que supervisó la construcción de las vallas de Bush.

La Patrulla Fronteriza identificó 90 secciones potenciales de cerco y completó 75 de ellas, dijo Adams.

En algunas ocasiones, el panorama, como los elevados peñascos de Big Bend de Texas, impidieron la colocación de la valla.

La agencia terminó construyendo casi 600 millas (965 km) más para llegar a la cantidad actual de aproximadamente 700 millas (mil 126 km), dijo Adams.

La Oficina de Responsabilidad Gubernamental de Estados Unidos, reportó que aproximadamente 530 millas (852 km) fueron construidas entre el 2005 y el 2015.

¿Un ‘gran muro’, o más vallas?

Anticipándose a las demandas del equipo de transición de Trump respecto al “gran muro”, líderes de la Patrulla Fronteriza prepararon estimaciones del costo.

El precio estimado de 15 a 20 mil millones de dólares que son necesarios para construir un muro de 700 millas (mil 126 km) de largo es parecido a otras cifras basadas en las declaraciones de campaña realizadas por Trump.

Podrían necesitarse otros 500 millones de dólares para construir caminos de acceso y otra infraestructura para edificar esa barrera. (Anrew Becker/Centro de Periodismo Investigativo)

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