Ninguno de los dos partidos mayoritarios y sus aliados tradicionales sumarían los 176 escaños que dan la mayoría absoluta en la cámara baja
MADRID.- El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ganó el domingo la repetición de unas elecciones generales que no arrojan una opción de gobierno clara, pero en las que la formación de extrema derecha Vox se consolidó como tercera fuerza política.
Con el 94% del escrutinio completado, la candidatura del presidente del ejecutivo interino, Pedro Sánchez, llevaba 120 escaños, tres menos que en las elecciones del 28 de abril. Entonces, aunque también fue la más votada, no logró cerrar una coalición de gobierno con su socio natural, la formación antiausteridad Unidas Podemos, que ahora tendría 35 escaños, desde los 42 anteriores.
En la derecha, la principal agrupación de la oposición, el Partido Popular, se recuperó de la debacle sufrida en abril y obtendría 85 representantes.
Ninguno de los dos partidos mayoritarios y sus aliados tradicionales sumarían los 176 escaños que dan la mayoría absoluta en la cámara baja.
El gran vencedor de la noche fue Vox, el partido más de derecha en el arco parlamentario español, que apenas siete meses después de su entrada en el Congreso de los Diputados se presenta como la tercera fuerza más votada con 53 escaños, casi el doble de los 24 en abril. El partido hizo campaña con la promesa de adoptar una estrategia dura tanto frente al movimiento independentista en Cataluña como para contener la inmigración.
El tropiezo más notable fue el del partido de centroderecha Ciudadanos, que pasó de ser la tercera fuerza con 57 diputados a la sexta, con apenas 10.
Los comicios se celebran apenas un mes después de que un tribunal dictó penas de prisión para nueve políticos y activistas que lideraron una campaña secesionista en 2017. Las sentencias desataron multitudinarias protestas diarias en la calle, en las que hubo más de 500 heridos, casi la mitad de ellos policías, y docenas de detenidos.
La principal formación de la región nororiental en el parlamento nacional volvería a ser Esquerra Republicana, que aunque perdió dos escaños se convertiría en el quinto partido en representación parlamentaria con 13.
Los otros representantes del movimiento secesionista, Junts Per Catalunya, la formación del expresidente catalán Carles Puigdemont, y la Candidatura de Unión Popular (CUP), que se estrenaba en unas elecciones nacionales, tendrán 8 y 2 representantes, respectivamente.
Una de las novedades más sorprendentes sería la entrada del movimiento ciudadano ¡Teruel Existe! con un representante. El grupo de electores busca llamar la atención sobre la España que se vacía, el fenómeno que refleja el despoblamiento de las zonas rurales del país.
Los 37 millones de españoles con derecho a voto eligieron a los 350 diputados de la cámara baja y a 208 senadores.