OJINAGA.- Constantemente se puede observar al personal de la JMAS de Ojinaga trabajando en el ¨destape¨ de algunos sectores o puntos en las vialidades de nuestra frontera. En el sector centro uno de factores de estas obstrucciones es la grasa que vierten los restaurantes en el alcantarillado.
Cesar Carrasco Director ejecutivo de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento en Ojinaga comenta que, la norma dice que los restaurantes deben de tener una trampa de grasa colocada a la salida de la red de alcantarillado, en donde los sólidos y grasas se queden, y seria responsabilidad de ellos retirarla. Ante la falta de las misma la JMAS cuentan con un programa de mantenimiento a la red de alcantarillado de los restaurantes, el cual tiene un costo de 300 pesos mensuales para los mismo, esto para evitar problemas mayores de obstrucción del alcantarillado en las partes bajas de las ciudad.
Chihuahua y Juárez por ejemplo cuentan ya con la reglamentación en esa citación para evitar este tipo de problemas; Ojinaga –se espera—pronto cuente con esa reglamentación para el buen funcionamiento de nuestro sistema de drenaje.