PRESIDIO TEXAS.-Dentro del tramo de 500 millas del sector Big Bend de Custom and Border Protección, un total de 9 mil 637 migrantes, entre familias, adultos solteros y niños, fueron detenidos o entregados a funcionarios de inmigración en el año presupuestario que terminó el 30 de septiembre, según datos del gobierno publicados el pasado martes.
Aunque la cifra representa un máximo para la avanzada rural, también refleja a la menor cantidad de migrantes de cualquiera de los cinco sectores del estado durante el año.
En toda la frontera suroeste, el número total llegó a 977,509, que es el total más alto desde 2007 y refleja un aumento del 88% con respecto al año fiscal 2018.
«Estos son números que ningún sistema de inmigración en el mundo puede manejar, ni siquiera en este país», dijo el comisionado interino de CBP, Mark Morgan, durante una conferencia de prensa en El Paso.
En el mes de mayo, el número de migrantes en la frontera sur, principalmente familias de Guatemala, Honduras y El Salvador, alcanzó máximos historicos. En ese momento, el sector Big Bend también comenzó a ver un fuerte aumento en el número de migrantes. La estación de Presidio experimentó el mayor aumento en las detenciones, rompiendo récords diarios, semanales y mensuales.
Desde entonces, los números mensuales de aprehensión han ido disminuido en gran medida.
Durante su conferencia de prensa con los periodistas, Morgan atribuyó varios esfuerzos de la Administración Trump por la caída constante, incluidos los Protocolos de Protección al Migrante. La política, también conocida como “Permanecer en México”, requiere que los migrantes que buscan asilo esperen sus audiencias de inmigración en México. Este año, el gobierno dice que más de 50,000 migrantes han sido enviados a México a través del programa para esperar sus audiencias de asilo.
El controvertido programa se implementó por primera vez a principios de este año en California y pronto se expandió a las principales ciudades fronterizas de Texas, como El Paso, Laredo, Brownsville y, recientemente, Presidio y Eagle Pass.
Los críticos de MPP dicen que se obliga a los inmigrantes ya vulnerables a esperar en las ciudades mexicanas donde enfrentan extorsión, secuestro y acoso.
La administración Trump también ha citado la medición como una práctica efectiva. La política limita el número diario de migrantes que pueden acercarse a los puertos de entrada para solicitar asilo.
A pesar de la caída desde el mes de mayo, Morgan dijo a los periodistas el martes que la crisis humanitaria en la frontera continúa.
«Aunque hicimos grandes avances, con un progreso significativo … todavía recibimos demasiadas detenciones por día», dijo Morgan, rodeado de agentes de la Patrulla Fronteriza. «y esto sigue siendo una crisis».
